Ciudad Victoria, Tamaulipas.- Solo una parte de los municipios fronterizos de Tamaulipas están a salvo de la sequía que enfrenta el Estado, de acuerdo con la reciente medición del Monitor de Sequía de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), que precisa que el 10 por ciento del territorio estatal no enfrenta problemas de abastecimiento de agua, mientras que 20 municipios se encuentran en “foco rojo”.

De acuerdo al Monitor de Sequía, el 89.6 por ciento del territorio de Tamaulipas padece sequía y, solo se salva una pequeña franja de municipios fronterizos que representa el 10.4 por ciento de la superficie, donde no se registran afectaciones por la escasez de agua.

El Monitor de Sequía de la Conagua, establece el siguiente diagnóstico en Tamaulipas: 10.4 por ciento del territorio sin sequía; 13 por ciento anormalmente seco: 13.3 por ciento con sequía moderada; 24.8 por ciento sequía severa, y 38.5 por ciento con sequía extrema.

Esto a pesar de que la Conagua señala que el transcurso de la primera quincena de marzo algunas regiones fronterizas de Tamaulipas registraron anomalías positivas de precipitación provocadas por los fenómenos meteorológicos que impactaron en el territorio nacional.

Esto incluyó el desplazamiento de dos frentes fríos (39-40), propiciando eventos de “Norte”, aunados a la masa de aire polar asociada al frente; además de la interacción con vaguadas polares, canales de baja presión y las corrientes en chorro polar y subtropical, en combinación con la entrada de humedad proveniente ambos litorales.

Sin embargo, con un bajo nivel de almacenamiento en las presas, se pronostican, a partir de abril, el inicio de la temporada de olas de calor extremo, de los cuales se esperan cinco fenómenos de este en los siguientes meses.

Además, en el semáforo del agua en Tamaulipas, más de 20 municipios se encuentran en rojo al estar atravesando una temporada de estiaje y las precipitaciones pluviales registradas son mínimas, esto se deriva a que las principales fuentes de abastecimiento se encuentran bajas y por tanto no tienen la capacidad para atender la demanda de agua con fines de uso doméstico.